Page 16 - Valdediós
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Valdediós, Valle de Dios
Valdediós, Valle de Dios
Fray Juan José de León Lastra. O.P.
Esta denominación procede de que el pequeño valle estaba en torno a lo que,
si en principio fue una residencia palatina de Alfonso III, desde el siglo XIII la
residencia palatina dejó lugar a un monasterio cisterciense.
Cuando se le visita se admira la Iglesia prerrománica, el Conventín, resto
maravilloso del antiguo conjunto palatino. A su lado, así, al lado de la iglesia, se
alza ahora el monasterio de estilo renacentista. Monumental, pero que no se
impone sobre la belleza sencilla del Conventín.
En los últimos tiempos, no ha sido fácil para las autoridades eclesiásticas, titular
del edificio encontrar instituciones religiosas que superaran la frustración de
vacío de una construcción tan relevante, en un lugar tan maravilloso. Es decir:
lograr que siga siendo Valdediós.
El problema vocacional de los institutos religiosos, se dice, es la primera causa del
vacío de monasterios, del cierre de no pocos. Pero quizá es necesario encontrar
más razones. Que a su vez pueden explicar esa escasez vocacional en el mundo
occidental cristiano.
Pensemos en que el monasterio acoge de nuevo a una comunidad de monjes,
la pregunta primera que suscitaría sería ¿Qué hacen esos hombres allí? ¿Qué
hacen? Vivir es hacer, producir. El ser humano es ante todo el homo faber. Si no
hacen algo tangible, que pueda ser valorado económicamente, el valor reducido
al precio, no se ve razón para existir. La historia de la modernidad se entiende
desde las diversas revoluciones industriales. De cómo producir mejor y más
abundante. Ahora bien, esto no es una cuestión puramente económica, es una
interpretación de la condición humana, de su ser…, reducido a producir.
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