Page 77 - Asturias, Covadonga y su entorno natural
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REAL SITIO DE COVADONGA CovadongaInstitución Teresiana
SAN PEDRO POVEDA
formación del profesorado de Normales y de Poveda realizó un detallado análisis de lo que
los inspectores de escuelas de instrucción pretendía para que se iniciara en Madrid en
primaria. Lógicamente, su trascendencia en breve plazo, dándole el título siguiente: “Es-
el plano educativo alcanzaría a todo el país. tudio y presupuesto para la fundación de una
Residencia de Estudiantes”.
Poveda centró su interés en las generaciones
que llegarían a tener responsabilidad direc- Aquel escrito, con exposición, planteamien-
ta en la escolarización y enseñanza primaria tos y presupuestos muy documentados, no
de cada provincia. Para que los estudiantes alcanzó su objetivo por falta de medios en ese
del nivel superior pudieran completar su for- momento. Pocos años después hizo memoria
mación y, en un cambio de época realmente de lo sucedido:
crucial, salir al encuentro de las necesidades
sociales, buscó un medio asequible como era “Siendo canónigo de Covadonga pro-
la creación de una residencia y centro peda- yecté la fundación de un Internado en
gógico en Madrid, que facilitase al máximo a Madrid para alumnos de la Escuela
los residentes su formación humana, desarro- Superior del Magisterio. Envié presu-
llo intelectual y maduración de su fe cristia- puestos... pero no pudo llevarse a efecto
na. Buscaba que con una educación integral lo proyectado…”. 12
se prepararan para su compleja misión en el
ejercicio de la profesión educadora. Su propuesta reunía las condiciones necesa-
rias para el fin que se proponía, sin embargo,
Desde el primer momento deseaba que tal la imposibilidad de conseguir los recursos
oportunidad de formación no diferenciase a necesarios para llevarla adelante fue paradó-
los candidatos según tuvieran, o no, recursos jicamente punto de partida para posteriores
materiales. Por este motivo buscó la ayuda propuestas educativas. Un proyecto de tanta
de algún donante dispuesto a sufragar gas- concreción era una prueba de que Poveda se
tos de locales, mantenimiento y docencia. En había formado, ya en Covadonga, una con-
este terreno conocía la eficaz ayuda de don ciencia clara de aspectos muy decisivos del
Gonzalo de Figueroa en la creación de escue- panorama pedagógico contemporáneo, tanto
las en el barrio de las cuevas de Guadix; era en España como en Europa, y de la urgencia
un hombre dispuesto a seguir apoyando sus de darles todo el valor que correspondía.
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iniciativas innovadoras y, contando con él,
Pedro Poveda se hacía cargo de ese escena-
rio en permanente cambio. Percibía un nuevo
horizonte ante los sucesos nacionales de todo
11 Don Gonzalo de Figueroa y Torres, aristócrata orden y, en el recinto de Covadonga donde
afincado en Madrid, ciudad de la que fue alcalde transcurría su quehacer diario, cambiaba im-
en los primeros años del siglo XX, era marqués de presiones con quienes compartían sus mis-
Villamejor, conde de Mejorada y duque de las To-
rres. Hombre culto, de sentimientos nobles y gene- mos intereses y preocupaciones. Desde allí
rosos. Por sus intereses mineros en Linares y sus mantenía comunicación con círculos educati-
conexiones políticas en el sur de España, conocía vos de Oviedo y Gijón. También con diversos
a la familia paterna de Pedro Poveda, a través de ámbitos y asociaciones de maestros católi-
la cual tuvo posibilidad de acercarse y apreciar su cos de Madrid y Andalucía, que frecuentaba
labor apostólica en la zona de cuevas de Guadix.
Desde entonces y hasta su muerte en 1921 fue co-
laborador incansable de la obra de Poveda a quien
trató siempre con admiración y respeto. 12 Notas autobiográficas escritas en 1915, AHIT.
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