Page 73 - Asturias, Covadonga y su entorno natural
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REAL SITIO DE COVADONGA CovadongaInstitución Teresiana
                                  SAN PEDRO POVEDA




                     Él mismo estaba -lo estuvo siempre- a la bús-
                     queda de respuestas. Su constante atención a
                     los signos del tiempo presente le llevó a consi-
                     derar los problemas originados en la vivencia
                     de la cultura -los conflictos y exigencias de
                     una conciencia libre en su criterio y decisio-
                     nes, incluso el respeto a las normas-, lo que
                     para él significó interrogarse por el conflicto
                     existente entre cultura y fe. Su mirada se fue
                     haciendo más compleja en Asturias: se le hizo
                     patente que un cristianismo moderno inspira-
                     do en los orígenes no era incompatible con las
                     ciencias y su progreso. Era en la vida creyen-
                     te  –con  la  formación  necesaria-  donde  veía
                     una clara posibilidad integradora.
                     La tolerancia y respeto lo distinguieron siem-
                     pre; los que le trataban de forma asidua en
                     aquellos estrechos valles, coincidieron en la
                     siguiente semblanza, en forma de soneto: “Jo-
                     ven, rubio, andaluz, fino, elegante, / grave,
                     discreto, culto, bondadoso / naturalmente,
                     y además virtuoso, / sacerdote de vida edi-
                     ficante, / canónigo escamón, y con bastante
                     / recámara y trastienda.  Laborioso. / Para
                     sí mismo, un poco escrupuloso; / para el
                     prójimo,  en  cambio,  tolerante.  /  Con  un
                     miedo cerval a las corrientes, /  huyendo   Desde  1908  Pedro  Poveda  recuperaba  fuer-
                     siempre la humedad y el frío…/ Tales son,   zas  mientras  asumía  un  encargo  grato  pero
                     oh lector, las más salientes / cualidades de   de cierta complejidad: ser tutor de estudios
                     un cierto amigo mío / (si alguna en el tin-  del hermano menor y de un primo, ambos en
                     tero no se queda) / cuya firma es así: Pedro   edad adolescente que habían acreditado mo-
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                     Poveda”  .                            tivación escasa, o nula, para el estudio; con
                                                           él, durante años, conocieron Asturias, disfru-
                     El trato cordial y la sinceridad se matizaban   taron de la vida al aire libre, volvieron a los
                     en él con la reserva y discreción obligadas en   libros. Para ellos inició una serie de notas que
                     quien vivía el recuerdo de Guadix “tan vivo   recopilaría luego; en ellas iba precisando su
                     como oculto”, diría en 1918. Así traslucía su   idea  de  la  preparación  de  la  juventud,  con
                     postura en un apunte educativo de 1910, “re-  una exigente visión de la vida adulta.
                     servado pero no taimado; prudente, pero
                     no  suspicaz;  sincero,  pero  sin  ligereza.   Deja que los demás sean como fueren,
                     Trata a todos con respeto”.             pero  tú  sé  como  Dios  quiere  que  seas
                                                             -  Tu  trabajo  no  está  en  despojarte  del
                                                             ser que tienes y en adquirir otro nuevo,
                                                             sino en perfeccionar todo tu ser.
                     3  Leandro  Sánchez,  Canónigo.  Covadonga  12
                     mayo 1909.



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