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Nuestro Concejo de Onís
LA TORRE DE VILLORIA. LOS ONÍS.
Sarandeses (Heráldica, Oviedo 1966) lo describe escuetamente: “Apellido de familia
noble asturiana. Su casa solariega se encontraba en la Torre de Villoría “La Torrona”
posee escudo partido, vistiendo primero de plata con tres palos de gules y segundo
de sable con dos cruces de oro puestas en oro.
Autores anteriores citan como escudo lo siguiente: Según el manuscrito, el
cual será crucial para analizar el origen del concejo de Onís titulado “Epitome de la
Crónica del Rey Don Ivan el Segundo de Castilla” hecho por Joshep Martínez de la
Puente, lo dedica al Señor Don Ambrosio de Onís, editado en Madrid en 1678.
(…) Galicia y en las Asturias de Oviedo de donde salieron sus hermanos del apellido
y Noble Alcuña de Onís, entre los otros cavalleros, que como antiguos venerables
Fragmentos Españoles, en quien pulsava la fidelidad, y catolicismo, ayudaron al In-
fante Don Pelayo en las empresas y tareas militares hasta que comenzó a librar a Es-
paña de la opresión del barbaro dominio de los moros, Por cuyos hechos los heredo
en diferentes tierras y posesiones del Principado de Asturias y señaladamente en el
Valle y Concejo de Onis, catorce leguas de la ciudad de Oviedo, en el igual valle,
a dos leguas de Cobadonga esta la Torre de Villoria, de quien fue señor Tomas de
Onis, tercer abuelo de VM por haber sido hermanos los dos caballeros referidos, que
militaron con el Infante Don Pelayo, les dio por armas dos cruces blancas en campo
azul, a semejanza de la que tomo entonces por divisa y se le apareció en el cielo para
animarlo en tan gloriosa empresa…”
Este edificio hoy en dia derruido anteriormente a la Guerra Civil, se encontraba en la
entrada del barrio de Benia de Onís de Villoria.
Destruida la “Torrona”, Sacramento Prieto Noriega, según cita Valentín Me-
dina, escribió en la revista “Asturias” un sulfuroso articulo calificando el hecho de
una asquerosidad.
En mi juicio personal, fue el mayor desacato y atentado a la historia y la arqui-
tectura monumental del concejo de Onís. En aquel tiempo con medios punibles se
podía haber aplicado para evitar la desaparición del testigo monumental de nuestra
historia y nombre de Onís.
D. Pablo Beltrán de Heredia y Onís, de la rama de la familia de Onís que se
avecindaron en Salamanca hace una cita (con ocasión de su paso como catedrático
de la Universidad de Oviedo) y dice sobre el mismo:
“Esta Torre de Villoría de los Onís, en el barrio de este nombre del pueblo de Onís [
de nuevo la recurrente confusión de la capital con el nombre del concejo], se erguía
aunque en ruinas, a principios del siglo actual [s.XX] (…) visite el lugar y los restos y
el emplazamiento en la antigua Torre de Villoria lugar que era conocido por los luga-
reños como Torre de los Onís…” [1]
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