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Nuestro Concejo de

J.A.G.G Onís

José Antonio González Gutiérrez
Ex Alcalde de Onís 1987-2011

LA CASA DE CEBOS.
Es conocida la historia, a partir de 1502 con las Leyes de Toro, por la cual los
señoríos rurales, consolidaban el patrimonio familiar mediante la figura jurídica del
mayorazgo. A este le unían una cuidada política matrimonial. Al fin el objetivo de
acrecentar sus caudales e influencias.
En Onís destacará Los Cebos, o Zebos (ambos nombres equivalentes). La casa
de Cebos, estaba situada al noreste de Benia de Onís. En ella habitaron Juan Gonzá-
lez de Cebos, señor en Onís (posiblemente nacido hacia 1550).
Hijo de Fernán Garcia de Cebos y su mujer María Sánchez de Cebos, eran ya
notables hacendados en Onís, Cabrales y Cangas de Onís.
El segundo precepto citado, se comienza casando a su hijo Juan González de
Cebos, con la hija de Gutierre Alonso de Intriago, llamada Juana Alonso de Intriago.
Esta hija de un hacendado propietario de la citada localidad de Cangas de Onís ya
citado anteriormente y escribano en Cangas de Onís.
A Juan G. de Cebos, le hace también mejora en su herencia su madre en 1572.
Diez años después, tomaran posesión de la Casa de Cebos y sus heredades.
La figura de Juan Gonzalez de Cebos, se destaca por la continua compra de
tierras, contratos de foro y arrendamientos, en Onís, Cabrales y Cangas, tal como ya
se citó. Posee también la depositaria general de Onís, comprada en 1572. Es propie-
tario de una escribanía en Oviedo.
Este matrimonio tiene dos hijas: María y Toribia. Será con Toribia, la cual se
abre camino hacia Ardisana (Llanes), casandose con la hija del Señor de Ardisana,-
Diego Fernandez de Harnero y Junco. Estos tendrán una hija Juana Fernandez de
Harnero y Gonzalez de Cebos, la cual ascenderá a una especial posición social.
Se concreta con su matrimonio con Antonio de Estrada Manrique de Guevara. Es el
segundo hijo de la casa Estrada en Llanes, puesto que el señor de la casa lo ocupa su
hermano Fernando.
Juan Gonzalez de Cebos, otorgo testamento en Avín el 12 enero de 1612, ante
el escribano Thoribio Gonzalez de Nava, en el mismo instituye heredera de todos
su bienes y señora de la Casa de Cebos a su hija Juana Fernandez Arnero y Cebos
(María ya había fallecido).
Es conocida la compra por Juan G. de Cebos, a favor del concejo, con
el fin de cedérselas al mismo, en vida de su nieta, esta no las había terminado
de cobrar.

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