Page 639 - Valdediós
P. 639

Manuela Fernández Junquera





        Provincia, como con Gijón. En este caso resulta necesario recordar que la minería
        y el desarrollo industrial, localizados en el centro de la provincia, provocaron un
        empuje importantísimo a toda la zona central de Asturias. La consecuencia más
        relevante e inmediata fue el desarrollo de las comunicaciones entre el Centro de
        Asturias y su natural salida al mar, lo que, a su vez, obligaba a facilitar y ampliar
        la comunicación por tierra. Este empuje producido por los municipios mineros
        repercutió negativamente en el desarrollo de las comunicaciones de otros
        concejos, como fue el caso de Villaviciosa. Ello explica que la carretera a Oviedo,
        a través de Pola de Siero, no se concluyera hasta 1870, año en el que aún no
        había finalizado la carretera con Gijón, su municipio vecino que, como hemos
        visto, ya empezaba a manifestar un desarrollo industrial creciente en aquellos
        años. Por finalizar esta panorámica relativa a las comunicaciones, cabe recordar
        que el municipio de Villaviciosa no cuenta con red alguna de ferrocarril, lo que
        no sucede con otros municipios costeros del oeste y otros más interiores al este.
        En este caso no fue por falta de interés del concejo que ya desde mediados del
        Siglo XIX fue ambición unánime conseguir la construcción del ferrocarril, por
        entender que era una de las zonas más prósperas y atractivas de Asturias. La idea
        era la de unir por vía ferroviaria Gijón-Oviedo-Infiesto-y Ribadesella, con una
        geografía que permitiría un sencillo trazado. Finalmente, y a pesar de haberse
        concedido la exclusiva para construir y explotar por 99 años el ferrocarril Sama-
        Siero-Gijón-Villaviciosa con derivaciones a Avilés y Oviedo, el ferrocarril quedó
        limitado en 1855 sólo a Gijón.


        El panorama descrito se debe a datos objetivos ajenos al comportamiento o
        voluntad de sus habitantes. Por ello, se hace necesario destacar su ánimo de
        empuje y laboriosidad, el cual queda reflejado en dos ejemplos paradigmáticos.
        Por una parte, el auge que supo dar a sus yacimientos de azabache, como veremos
        a continuación, y por otra, la respuesta rápida ofrecida ante la situación vivida
        en la región, en los comienzos del Siglo XX, durante la crisis azucarera sufrida en
        España por la falta de caña de azúcar.


        1.1 El azabache.


        La prospección y explotación de los yacimientos de azabache en Asturias se
        remonta a tiempos inmemoriales, existiendo datos históricos de su comercio
        desde finales del siglo XIII. Los afloramientos mayores están en Villaviciosa, en
        concreto en Villaverde, Quintes, Oles, Tuero, Argüero y Careñes. Resultan fáciles
        de descubrir para el geólogo, tanto en acantilados como en las excavaciones poco
        profundas realizadas en cauces fluviales. Existen citas y una continua tradición
        oral que relata la existencia de decenas de excavaciones y pequeñas galerías,


                                                639
   634   635   636   637   638   639   640   641   642   643   644