Page 371 - San martín del Rey Aurelio
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organizado por el Frente de Juventudes y celebrado en El Entrego.


            En el año 1959, llega a la parroquia de Sotrondio, como coadjutor D.
            Andrés López y forma un coro de voces mixtas que duró el tiempo
            que estuvo destinado en Sotrondio e incluso formó un ochote de vo-
            ces graves. A principios de los años 60, en lo que era la Obra Social
            de Educación y Descanso, se crea un nuevo coro de voces graves
            bajo la dirección del Sr. Pocovi con motivo de la visita a Sotrondio
            de Carmen Polo, que venia a inaugurar la Maternidad. Este coro duró
            algo más, dando posteriormente conciertos en Oviedo, Perlora, etc.

            Por último, aparece en escena, en Mayo de 1978, la Coral San Martín
            de Sotrondio, que en este año 2018 cumple cuarenta años de activi-
            dad ininterrumpida.

            Esta Coral nace en el seno de la Asociación Cultural y Recreativa,
            hoy conocida como el Casino de Sotrondio, a instancias del Vicepre-
            sidente del mismo Rosalino Orviz, y la colaboración del Secretario
            de la misma y algunos socios, que fueron sus primeros componen-
            tes, a los que mas tarde se unen otros que no eran socios. Por ello,
            un año y medio más tarde, se emancipan y comienzan su andadura
            solos. Hizo su presentación en público el 13 de mayo de 1978 con
            el nombre de Coral de Sotrondio, bajo la dirección de Enrique R.
            Almanza en el Teatro Virginia de Sotrondio y con treinta y dos com-
            ponentes sobre el escenario. A partir de Mayo de 1983, Justo Manuel
            G. Antuña pasa a dirigir la coral hasta la fecha.

            En el año 1992, a petición del concejal de cultura, ya que en aquel
            momento, solo existía esta Coral, pasa a incorporar el nombre del
            municipio, con el que se la conoce actualmente.


            Seguro, seguro  que ninguno de aquellos  componentes, se imagi-
            narían  entonces,  que  aquellos  primeros  compases  y,  nunca  mejor
            dicho, se repetirían durante tantos años, no solo por el Principado,
            sino por el resto del país e incluso fuera de nuestras fronteras.


            Son muchos años en los que creemos que la coral se siente orgullosa
            de llevar el nombre de su pueblo, municipio o región. Años que, se-








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